Ofrecer una perspectiva del mundo implica una renuncia y una conquista: esta última se da en la toma de conciencia de haber hallado algo original y personal que manifestar. En cambio, la renuncia acontece, cuando se tiene que adaptar esa intuición, por el afán de comunicarla, de acuerdo a los cánones establecidos para ello. En el caso de la artista Kate McDowell, felizmente ha logrado un balance extremo entre su muy particular visión del mundo (macabra, terrible, sabia y fascinante) y un medio como el modelado en porcelana. Resulta contrastante y no exento de una ironía reveladora, el hecho de usar un material tan delicado, como la porcelana, para comunicar una reflexión tan radical (en clave escultórica), acerca de temas como la muerte, la vida, la naturaleza, y el rol del ser humano en el cosmos.
Sitio web de Kate McDowell
Enlaces relacionados con este tema:
Tweet
No hay comentarios:
Publicar un comentario