A finales de la década de 1970, la NASA lanzó dos pequeñas naves, Voyager 1 and Voyager 2, con rumbo hacia los confines del sistema solar, antes de perderse en las profundidades del espacio. Actualmente, la sonda Voyager 1 es el objeto más distante creado por el ser humano y la sonda Voyager 2 se encuentra muy cerca de su "hermana", en esta lejana travesía. Ambas exploran áreas espaciales al borde de la influencia del sol y pronto llegarán a regiones de densas sombras y misterios. El programa Voyager está considerado como uno de los más redituables desarrollado por la NASA, tomando en cuenta su costo y los resultados obtenidos en cuestión de datos y conocimientos de los demás mundos de nuestro sistema solar. Una muestra de lo anterior son los registros sonoros obtenidos de diferentes planetas y cuerpos espaciales captados por las sondas Voyager en su larga ruta. Se trata de registros eléctricos emitidos por cada planeta, por supuesto, sin que se trate de "sonidos" en el estricto sentido del término: sin embargo, cada uno de ellos emite en intensidades y frecuencias diferentes y de esta manera son registrados por los sensores de las sondas Voyager. Al escuchar cada uno de estos sonidos, parecerían ser las "voces" de estos mundos lejanos "cantando" sus singulares memorias en su fascinante marcha cósmica.
Enlaces relacionados con este tema:
Tweet
No hay comentarios:
Publicar un comentario