Solo el conocimiento intelectual sobre las ideas, ofrece un saber auténtico, ajeno a las opiniones mudables del conocimiento sensible.
“Idea” es un término derivado de un vocablo griego que significa ver. En Platón, esta noción adquiere una referencia técnica, según la cual, una idea (éidos) es el centro de una visión interna, una intuición del intelecto. En contraste con lo sensible y variable, las ideas se relacionan con la esencia de las cosas, es decir, aquello que permanece fuera de todo cambio. Para la filosofía griega, la idea asumió principalmente el rol de fundamento ontológico: una suerte de especie universal, modelo o arquetipo.
Copias imperfectas
Las ideas, en el ámbito empírico, en múltiples casos, tienen una comprobación solo aproximada, es decir, las cosas de la realidad, participan de las ideas o se asemejan a ellas, pero nunca se identifican plenamente con ellas. Por esta razón, únicamente el conocimiento intelectual sobre las ideas ofrece un saber auténtico, ajeno a las opiniones mudables y efímeras, particulares del conocimiento sensible, y de la realidad cotidiana.
El fundamento del ser
Por lo consiguiente, la idea es, para la filosofía griega, el fundamento del conocer conceptual. Esta es la causa por la cual, Platón le asigna un estatuto ontológico particular, esto quiere decir, una manera de subsistir en sí, o de existencia en un ámbito totalmente inteligible- la región supraceleste mencionada en varios mitos platónicos- , y que será el objeto de severos cuestionamientos por parte de Aristóteles. El modo en que el fundamento ontológico de la idea deriva en materia cognitiva, es explicado por Platón a través de la noción de anamnesis, la doctrina de la reminiscencia. Esta ultima nos expresa que el alma, en el espacio supraceleste, ve las ideas, pero, cuando se une al cuerpo, al nacer humanamente, las olvida. Las cosas de la realidad cotidiana, ofrecen una lejana evocación de ese contacto ultraterreno con las ideas. Solo la dialéctica, la filosofía de acuerdo a Platón, puede devolverle a los humanos, esa visión originaria e instauradora.
Ideas y matemáticas
En el diálogo Parménides, Platón se plantea la pregunta de si existe una idea para cada cosa empírica. Generalmente, Platón limita la referencia de “idea”-de acuerdo a su doctrina primitiva identificando las ideas en las nociones matemáticas o morales, como, por ejemplo, lo bello, lo justo, lo bueno., etc. Acaso, por ello, en sus últimos años de vida, Platón intentó hallar un elemento de mediación y relación entre el ámbito supracelestial de las ideas y el ámbito mundano de las cosas materiales y los individuos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario